Santa Luzia es la única isla deshabitada de Cabo Verde, con 35 kilómetros cuadrados de paisaje virgen. El pequeño territorio está formado por acantilados al norte, largas playas desiertas y dunas de arena blanca al sur. La isla, junto con los islotes Raso y Branco, sigue siendo una reserva natural explotada por pocos.
Debido a su rica biodiversidad marina y a su importancia ecológica, el acceso a la isla sigue siendo restringido, reservado principalmente a fines científicos o educativos y a los pescadores de São Vicente.
Si tiene la oportunidad de visitar Santa Luzia, no se la pierda. Aquí, rodeado únicamente de naturaleza virgen, podrá tumbarse en una playa y contemplar la increíble puesta de sol mientras espera las cegadoras estrellas que cubren un cielo inmenso donde la contaminación no tiene cabida.